En la presente investigación se pretende realizar un análisis de los actores económicos que participan en el circuito de arte contemporáneo desde una perspectiva sociológica. Para ello se introducirán concepciones teóricas de distintos autores que permiten realizar una análisis desde variadas tradiciones sociológicas, lo cual, solo nos entrega la posibilidad de hacer un análisis más completo y exhaustivo que se enfoca a nuestros objetivos, determinar el cómo estos actores enfrentan su trabajo, planifican su actividad económica y sobre todo, reducen la incertidumbre.
Por incertidumbre se puede entender como la situación del actor en la cual él no conoce todas las variables que rodean a su actividad económica. Por lo cual se le presenta un presente y un futuro inciertos (Pindyck, 2001).
Un autor que se presenta como fundamental para poder realizar el análisis de este tema es Weber. En su obra presenta las características que debe tener una empresa, que en este caso es la galería de arte, para poder existir en el capitalismo moderno. Se utilizarán las premisas que Weber distingue que deben estar presentes en la forma en que se planifica la actividad económica y como se encuadran y tienen presentes las galerías de arte éstas a la hora de enfrentar el trabajo. A causa de que las premisas podrían no representar la situación económica actual se tratarán de reinterpretar algunas premisas en torno a la teoría de la racionalización y la burocratización del mismo autor, y a la vez, estas serán complementados con los planteamientos realizados por George Ritzer en su obra La McDonaldización de la sociedad, en la cual, el autor utiliza la teoría de la burocratización de Weber para poder realizar un análisis sobre como de desarrolla la actividad económica actual en ciertos sectores y para que la premisas no entren en contradicción con lo que se dirá de Senett más adelante. Las premisas son:
1. Apropiación de todos los bienes materiales de producción: Guarda relación con que la empresa sea dueña de los bienes materiales para la producción. No se puede hacer uso de esta noción, no al menos sin hacer una consideración, ya que en el caso del arte contemporáneo en Chile, el galerista no siempre es dueño de las obras sino que también puede éste generar una suerte de pacto con el artista, que sigue dueño de sus propias obras, pero el galerista expone las obras de este (Berrios, 2008). Por lo cual se considerará al artista como parte de la empresa, lo que significa que se cumple esta premisa si el dueño de las obras es bien en galerista o bien el artista.
2. Libertad mercantil, es decir, que la actividad se desarrolle libre de limitaciones impuestas, debe existir un trabajo y un mercado libres.
3. Técnica racional, lo que significa que el intercambio y transporte de los productos esté burocratizado, lo que implica que se desarrolle a través de un procedimiento estandarizado, eficiente, controlado, y en el que haya cuantificación de todos los costos (Ritzer, 2004)
4. Derecho racional. Se utilizará la idea de derecho racional cómo una administración que tenga formas claras y estandarizadas de cómo desarrollar la actividad, cuales son las operaciones formales que deben realizarse, junto con esto debe existir una cuantificación de las ganancia de la actividad (Ritzer, 2004).
5. Trabajo libre. Esta noción no será utilizada en su forma original ya que hace referencia a un momento histórico en que la libertad no era una garantía, esto a causa de la existencia de la esclavitud. Lo que se utilizará es la implicación que tiene el trabajo libre qué es el conteo racional de capital, que también guarda bastante relación con lo que se nombró en las premisas 3 y 4, que la actividad esté cuantificada y planificada en torno a eso, de modo que se puedan obtener resultados predecibles a la hora de participar en el mercado.
6. Comercialización de la economía. Esta premisa quiere decir que la empresa haga uso general de sus títulos de valor para ejercer su derecho de participación en la empresa (Weber: 1997). Para efectos de la investigación la premisa se considerará como qué el valor de las obras de arte es compartido en términos adquisitivos tanto por el artista y el galerista, es decir que, luego de haber hallado consenso en el valor de las obras ambos salgan beneficiados de la transacción (Colbert, 2007).
A partir de las premisas planteadas por Weber, teniendo presentes las consideraciones realizadas, se planteará la hipótesis de que el galerista que participa del circuito de arte contemporáneo realiza una actividad estandarizada, con procedimientos claros de acción que velan por la eficiencia. Junto con esto, el galerista debe poseer una forma estandarizada de operar al interior del mercado, y que estas formas consideren el cómo desarrollar la actividad en términos de la forma en que se invierte el capital, se distribuyen y comercian las mercancías y la forma en que la galería toma riesgos en un contexto de incertidumbre económica.
Para poder establecer, cuál es el criterio utilizado por los galeristas para la selección de sus mercancías y cómo se planificará la constitución de las galerías, se considerará la noción que Aspers desarrolla del concepto de moda. Para este autor la moda es concebida como una tendencia definida por un grupo acotado con la pretensión de diferenciarse de los demás y proteger un determinado estatus social. Es por esta razón que, cuando un elemento de moda se hace popular entre varios grupos deja de ser moda (Aspers, 2001).
Se ha dicho que la moda se define por un grupo acotado que tiene cierto estatus social. A la vez este grupo es legitimado y reconocido por los demás grupos como autoridades que pueden definir qué tendencias son o no moda (Aspers, 2001). A partir de lo dicho se desprende de la siguiente hipótesis:
Los galeristas seleccionarán las obras que constituirán su galería en función de las tendencias de moda que son impuestas por un determinado grupo. Y a la vez ellos son sensibles a los distintos cambios en la percepción que tienen de moda los integrantes de estos grupos. Esta noción se apoya en la idea que Velthuis maneja respecto a la valoración del arte, pues se entenderá que la forma en que el galerista constituye su galería responde a lógicas de un grupo en el cual el arte tiene un componente simbólico que le provee valor (Velthuis, 2006)
Otra dimensión a considerar es la desarrollada por Senett. El autor realiza una revisión de las características del capitalismo moderno y del nuevo capitalismo o capitalismo tardío. Al realizar esta tarea, caracteriza al individuo que triunfa en el capitalismo moderno tradicional, como un sujeto que es capaz de planificar su actividad económica en forma de rutina, en la que se planifican los costos y las acciones a realizar para poder generar una actividad ordenada y predecible. En contraste, muestra al individuo del capitalismo tardío, como una persona que va en contra de esta lógica de la rutina, asumiendo riesgos, desprendiéndose de esquemas estáticos. El autor asegura que el victorioso del nuevo capitalismo es aquel que es capaz de desprenderse del pasado y enfrentar riesgos con seguridad (Sennet, 2000)
Respecto a estas premisas se rescatan algunos elementos y también se pretende realizar una discusión con Weber para desprender finalmente la última hipótesis. Se rescata la noción de Senett de que, el individuo victorioso del capitalismo tardío (el de hoy) es aquel que está dispuesto a tomar riesgos en un contexto de incertidumbre (Es por eso que los paradigmas que rigen la galería del artista cambian en función de la noción dinámica y efímera de moda de Aspers), pero a la vez se rescata de la descripción que Weber hace sobre el actor de capitalismo clásico, de que el actor a la hora de asumir estos riesgos lo hace de forma estandarizada, controlada y siempre con la eficiencia por estandarte (Weber, 1997) (Ritzer, 2002)
Es importante destacar que la noción de riesgo existe en la actividad económica de las galerías como una constante, pero pueden hallarse diferencias dependiendo de lo consolidada y exitosa que sea esta al interior del circuito. Galerías que están más consolidas a pesar de regir su actividad económica en torno al grupo de referencia dado por la moda, también incurren en operaciones en las que no se contempla este grupo. El objetivo de esto es lograr captar nuevos clientes, nuevas posibilidades de ventas o simplemente educar. La consolidación de la galería es fundamental, ya que al tener un grupo de compradores fijos, la galería puede incurrir en estas acciones de carácter más riesgoso pues tiene la posibilidad de amortizar las pérdidas con los ingresos proveídos por sus compradores fijos (Weston & Copeland, 1994)
Por lo tanto a partir de lo anterior y considerando las hipótesis trazadas anteriormente, a forma de síntesis se esboza lo siguiente por hipótesis principal de la investigación:
El galerista de arte que participa del circuito de arte contemporáneo en Chile (Por lo que ha triunfado, pues ya es parte del circuito) y es capaz de sobrevivir en el contexto del capitalismo tardío y la incertidumbre económica, es un actor qué planifica su actividad en forma estandarizada en todas las operaciones que rodean su actividad, incluyendo esta la toma de riesgos. El papel del riesgo es esencial pues, al ser sensible a los cambios sobre el paradigma de moda que es definido por un grupo determinado, se enfrenta a una lógica caracterizada por el dinamismo y la agilidad sobre lo que es valorado, por lo que debe generar un método estándar que rija su procedimiento y controle la elección de modo que ésta sea la más eficiente.
Las galerías que forman parte del circuito de arte contemporáneo más consolidadas, además de lo anterior, en algunas ocasiones se alejan de la noción de moda, es decir, operan desprendiéndose de su grupo de referencia, incurriendo en operaciones de carácter más riesgoso a que si lo hicieran basándose en un paradigma de moda, esto debido a que tienen la posibilidad de amortizar las pérdidas de estos actos.
Bibliografía
Aspers, P. (2001) Markets in Fashion, A Phenomenological Approach, Stockholm: City University Press.
Berrios, M. (2008). Informe de diagnóstico artes visuales.
Colbert, F. (2007). Marketing de las Artes de la Cultura. Editorial Ariel.
Pindyck, R. (2001). Microeconomía. Madrid: Pearson.
Sennett, R. (2000). La corrosión del carácter: las consecuencias personales del trabajo en el nuevo capitalismo. Anagrama Capítulo 1-3.
Ritzer, G. (2002). La McDonalización de la sociedad: un análisis de la racionalización en la vida cotidiana. Barcelona: Ariel.
Velthuis, O. (2006). Talking Prices: Symbolic Meanings of prices on the Market for Contemporary art. Princeton University Press.
Weber, M (1997) Historia General Económica , México, FCE, pp. 236-310
Weston & Copeland (1994). Finanzas en administración. Mexico, McGraw Hill